Pasó Wayra Iglesias por la docta presentando su primer disco
Por el Juancho Mazzeo @largavida.alrock.radio
Tuve el placer y la suerte de escucharla en su primera presentación en la Casita del Blues, en el CR 23, luego en una previa de La Renga y también el el CR24, en cada ocasión me quedé con la misma impresión: qué buena voz, qué buena banda que la acompaña y qué lindo sería verla en algún lugar más pequeño cuando haga una gira por el país.
Es que en los lugares cerrados, más pequeños, se genera otro clima, otro vínculo entre público y banda, hay otra conexión que te llega de una forma más sensible al medio del pecho. Y esa sensación estuvo presente el viernes 1ro en Pétalos de Sol, ahí en San Juan y la Cañada, cuando Wayra Iglesias visitó Córdoba en la gira de presentación de su primer disco “La suerte de encontrarme”, en la que además aprovechó para compartir sus nuevos temas.
Viernes por la tarde el forcito salió nuevamente a la ruta, que da buena suerte y trae buena gente, para pasar a buscar a la familia viajera: Cielo, Eve y Leo, con quienes hacía un tiempo que no viajaba. Mate y chipa para compartir en el viaje rumbo a Córdoba. Unos días antes Eve me envió un mensaje “el viernes qué tenés que hacer? porque viene Wayra a Córdoba y con Cielo queremos ir a verla”, y mi respuesta “y… no sé, puede ser… bueno, vamos”. Así que pasé por San Marcos a buscarlos y allá fuimos.
Antes de las 9 ingresamos a Pétalos, saludamos a gran parte de la familia renga: Silvi, Tete, Lili y Silvio; y luego las caras conocidas de Cruz Diablo, la productora local que le viene poniendo el pecho al contexto y sigue apostando por el rock: Aldi, el Gonza y el Chueco. Entre abrazos con amigues que iban llegando, antes de las 21.30 comenzó a sonar Jinetes, una banda cordobesa/jujeña que ya había escuchado cuando fueron invitados por Los Piojos en el ritual del Kempes, y que no me había llamado mucho la atención con lo que ofrecieron esa noche. Pero el viernes fue diferente. Me sorprendieron gratamente con un recital muy power que fue calentando el ambiente para lo que se venía, buena selección de temas, una banda que suena prolija y te seduce, provocando ganas de volver a verla en algún momento. Suenan bien y recomiendo, más allá de escuchar sus discos en la matrix, disfrutenla en vivo.
Mientras terminaba Jinetes, nos enteramos que se habían agotado las entradas y eso se veía en un Pétalos estallado con mucha presencia de familias, de niñas que comienzan a tener, cada vez más, referentes mujeres arriba del escenario, algo que les permite soñarse, imaginarse en ese lugar, acercarse al arte desde otra mirada, otra experiencia. Y eso lo celebramos.
A las 22.20 Wayra Iglesias comenzó su primer recital en Córdoba fuera de un festival, con localidades agotadas: Intro, Todo el día, Este juego, Huir, Para olvidarte, Girando, Back to black, Satisfaction, Nunca nos apago, 326, Gin’s blues, Me gustas mucho, El viejo, Seguiré buscando, Mi perro dinamita, 2+2=3, No hay para siempre, Rock and roll. Una hora y media de una gran presentación, demostrando ese gran caudal vocal y el vínculo con un público que cantó cada canción.
Además de la gran profe de canto que tiene Wayra, como es Nina Portela, cuenta con grandes músicos en su banda: el Tano Baccega, Lucas Kocens y el Negro Roja, que permiten un disfrute de esos registros vocales de forma cri-mi-nal.
Nos volvimos muy felices por la actuación de Wayra, por el recital que brindó, por animarse a su primera gira y agotar entradas. En el viaje de regreso nos acompañó la voz del Indio, como siemPRe, en una noche muy tranquila por las rutas del noroeste, luego de haber presenciado una gran presentación.
Nos vemos la próxima.
Pd: gracias a Cruz Diablo, a Aldana, por permitir que medios autogestivos y comunitarios podamos cubrir el recital.
